Finalmente, este viernes, la Policía Antiterrorista de Bélgica logró la captura del terrorista más buscado en la Unión Europea (UE); el yihadista Salah Abdeslam, miembro prófugo del comando islamista que desangró París el último 13 de noviembre con una seguidilla de ataques conjuntos efectuados en la capital francesa que terminó costándole la vida a 130 personas.
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La aprehensión del criminal fue confirmado por el propio secretario de Estado de Inmigración belga, Theo Francken, quien a través de su cuenta de Twitter anunció: “Lo tenemos”. La operación policial se llevó a cabo en el barrio bruselense de Molenbeek, en el número 72 de la calle de Quatre-Vents. Según informa la prensa internacional, Abdeslam resultó herido tras recibir un impacto de bala en la pierna.
La detención del yihadista tiene lugar -coincidentemente- cuando los principales líderes de la UE se encuentran en la capital belga discutiendo una posible solución ante la crisis de inmigrantes y refugiados sirios que ha generado crispaciones en algunos mandatarios del viejo continente.
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“Quiero acordarme de las víctimas del atentado del 13 de noviembre. Porque Abdeslam estuvo directamente ligado a la organización y ejecución de esos atentados”, aseguró en declaraciones a la prensa el presidente francés, Francois Hollande, que catalogó la captura de hoy como un “resultado importante en la batalla por la democracia y contra el oscurantismo”.