¿Bolsa de plástico? Sí, por favor, por Jessy Gonzáles

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Debo confesar que aún no me acostumbro a no pedir bolsa de plástico en el supermercado. Yo sé, tengo que dejar de hacerlo. Y también sé que las bolsas plásticas demoran un montón en desaparecer de la faz de la tierra. Y entiendo también que no son necesarias. Pero me olvido de meter en la cartera cada vez que voy de compras la bolsa de tela roja tan linda que compré para ese fin. Concluyo entonces que, como tantas otras acciones de tantas otras personas, la razón no ha bastado para cambiar mis hábitos. Entender las razones por las cuales debo cambiar mis acciones no es suficiente para hacerlo. ¿Por qué fue tan sencillo reducir el tiempo de mi ducha diaria y aprendí a cerrar el caño mientras me lavaba los dientes, pero no puedo con la bolsa de tela?

En una de mis clases el año pasado conversamos acerca de cómo algunas políticas públicas están basadas en investigaciones psicológicas y en las formas más eficientes de modificar el comportamiento humano. El libro que acompañaba esta clase (Nudge de Richard Thaler), en uno de sus capítulos relataba por ejemplo, el caso de las cafeterías en Estados Unidos. Se había identificado con claridad la necesidad de mejorar la alimentación de alumnos de secundaria. Y cualquiera pensaría “¡muy sencillo!, lo único que necesitas es dejar de servir hamburguesas y gaseosas, y empezar a servir más ensaladas y productos integrales”. El problema de dicho cambio que aparenta ser muy sencillo, es que hay casos en los que productos “poco saludables” (hamburguesas, pizzas, gaseosas, entre otros) y su permanencia en las cafeterías estadounidenses están fuertemente vinculados a la donación de fuertes sumas de dinero a las instituciones o al auspicio de sus equipos deportivos o similares. De modo que retirar los productos, si bien es factible, es poco probable puesto que nadie quiere renunciar a estas sumas de dinero.

“¡Pero la salud de los jóvenes está por encima de todo!” Cierto, pero ¿hay alguna alternativa? Se investigó entonces si el orden en el que se colocaban los alimentos en la cafetería alteraba las decisiones finales de los consumidores, y resultó que sí. Colocar los vegetales y las frutas antes o después de la comida “grasosa” tenía un impacto; de modo que se podía rediseñar la cafetería para tener lograr un cambio en el consumo sin desaparecer los productos menos saludables de las opciones, y sin perder por ende las donaciones que grandes empresas hacen a estas instituciones educativas. En publicidad, llevan años estudiando cómo influenciar la conducta humana y en particular, la toma de decisiones. Digo, no es casualidad que en Wong tengas que hacer la cola para pagar rodeado de montones de productos altamente provocativos. ¿Por qué no se ha usado la misma lógica para tener impacto en temas de salud pública por ejemplo?

Seguramente ya se hace en muchos lugares y quizás también en Perú. Pero quiero resaltar dos puntos: Primero, es necesario que se investigue más y se diseñen más políticas públicas que tengan un respaldo en estudios psicológicos o de modificación de conducta. Principalmente cuando se trata de políticas que requieren de la acción individual para lograr resultados exitosos. Y segundo, si aún no he logrado rechazar las bolsas de plástico en los supermercados, no es únicamente porque no me da la gana o porque tengo muy mala memoria, sino porque a nadie le ha importado que yo lo haga. Y con esto no quiero deslindar ningún tipo de responsabilidad (el mea culpa ya está hecho), pero ni el Estado ni los supermercados se han comprado el pleito de mi cambio de actitud y de todos los peruanos. Una ley que prohíba las bolsas, una política de la empresa con la cual empiecen a cobrar por cada bolsa que dan, colocar bolsas de tela a la venta justo antes de la caja… Hasta ahora, he visto poco. Así que mejor, en este momento meteré mi bolsa de tela roja en mi mochila y procuraré tener una en todas mis carteras. Mientras alguien más se compra el pleito, confiaré en la acción individual de cada quien, incluyendo la mía. ¿Será posible en el Perú?

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