Hace apenas unos minutos, el Canciller Boliviano, David Choquehuanca, ofreció una conferencia de prensa para ratificar que el estado boliviano no dilató el proceso de extradición de Martín Belaunde Lossio. Al contrario, presentó una serie de pruebas que certificarían que el gobierno peruano no respondió a la última fase del proceso.
«Las resoluciones dictadas por la CONARE se encuentran plenamente vigentes ordenando su cumplimiento. El 14 de mayo nosotros hemos trasmitido formalmente a la Embajada de la República de Perú, copia legalizada del autosupremo de la extradición para que el gobierno peruano confirme el personal. Les solicitamos el traslado del extraditable, el lugar y la fecha de entrega. Al presente no se recibió ningún pronunciamiento oficial del gobierno peruano y aquí tenemos la nota que enviamos el 14 de marzo, recibido por la embajada». Denunció el canciller Choquehuanca.
Choquehuanca se limitó a hacer lectura de una serie de documentos que verificaron que la Justicia Boliviana respondió a todas las solicitudes peruanas y, según el trámite de extradición que solicita arresto provisorio, ambos países pactaron que la modalidad sería detención domiciliaria.