Canciller de terror, por Alejandro Oliva

Héctor Béjar Rivera, el nuevo titular del Ministerio de Relaciones de Exteriores, no es el típico Canciller que sostendrá lazos de confraternidad con los Estados democráticos del extranjero; y es que, en realidad, apenas sostiene fraternidad con el pueblo peruano.

Desde su nombramiento despertó el interés de gran sector de la opinión pública por saber de quién se trataba. Sociólogo de carrera y con acentuada inclinación por las ideas políticas de izquierda, tiene como primera «distinción» para conformar el gabinete ministerial de Guido Bellido, el haber sido fundador del grupo terrorista: «Ejército de Liberación Nacional (ELN)» que, por cierto, liberar era lo último que pretendía; asesinar en nombre de la revolución era a lo que se dedicaban.

Por otro lado, y como segunda «distinción», es el reconocer como democracias a las más férreas, sanguinarias e inhumanas dictaduras contemporáneas. Héctor Béjar considera que Venezuela y Cuba tienen problemas internos como cualquier otro país y que deben resolverlo sin que otros Estados intervengan.

Por último, y no menos importante, la primera disposición del canciller hace algunos días, fue retirar a nuestro país del Grupo de Lima, iniciativa creada con la finalidad de apoyar a la oposición democrática de Venezuela contra la represión comunista ejercida por el asesino dictador Nicolás Maduro. La razón por la que tomó esta decisión según sus propias declaraciones es que el Perú «se unirá a las naciones europeas y latinoamericanas que trabajan contra los bloqueos unilaterales que perjudican económicamente a este país». En conclusión, el Estado peruano se sumará al grupo de Estados antidemocráticos que defienden la errónea idea de que el problema económico en Venezuela —y Cuba— se debe a un bloqueo unilateral de EEUU. Inaudito.

Hasta acá, podemos darnos cuenta que el señor Béjar cuenta con las credenciales perfectas para poder ser integrante del gobierno Castillista-Cerronista; ya que, como han demostrado los líderes de Perú Libre, la meritocracia a la que se referían es el de defender terroristas, dictaduras y no saber ni un mínimo de economía.

Que no sorprenda que, las relaciones diplomáticas del Perú en un corto plazo sean, principalmente, con los integrantes del Foro de Sao Paolo. Grupo creado con finalidades «reformistas» y de ideología de izquierda radical. De esta manera y, de la mano del ministro Béjar, se iniciará con la agenda globalista socialista en nuestro país, tal como lo ha venido realizando Argentina y como lo anunció un sinfín de veces el verdadero líder y gobernante, Vladimir Cerrón.

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