Esto no da más, por Carlos San Román

"El país no da más. Es una bomba de tiempo y cuando estalle, el resultado será un gobierno radical de izquierda. No un gobierno socialista light o progresista que a muchos no les gustaría, sino un gobierno de izquierda radical".

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Soy liberal, creo en la libertad individual, la propiedad privada y en el libre mercado. Hago esta aclaración para que los desentendidos en la materia y los fanáticos, no me digan de manera ligera que soy progresista, socialista o alguna otra barbaridad.

El país no da más. Es una bomba de tiempo y cuando estalle, el resultado será un gobierno radical de izquierda. No un gobierno socialista light o progresista que a muchos no les gustaría, sino un gobierno de izquierda radical. Muchos piensan que, para llegar a ser la nueva Venezuela hay que pasar primero por ser la nueva Argentina, lo cual ya estaría muy mal. Creo que se equivocan. Sí es posible ir de Perú a Venezuela sin pasar por Go, sin ningún paso previo.

Y es que la olla de presión está a punto de reventar y muchos no lo ven y solo les interesa proteger lo que hoy tienen, es decir el statu quo. Este mensaje es para ti que quieres proteger a toda costa lo que has ganado con mucho esfuerzo. Proteger tus propiedades, tus comodidades, tu status y tu forma de vida, a pesar de que eso signifique ponerle más presión a la olla. ¿A qué me refiero? A que eliges a tu candidato solo porque es de “derecha”, como si eso fuera suficiente. No importa si las ideas que tiene son malas o inviables, o si la probabilidad de éxito de su gobierno es baja. Solo importa que, si es de “derecha”, es bueno. Sueñas además que la corrupción desaparecerá con un hechizo, con el tronar de los dedos de un nuevo super poderoso presidente de “derecha”.

Lo siento, pero no. No es suficiente. La única forma que en el futuro puedas mantener o incrementar tu riqueza bien ganada, es bajando la presión a la olla, y esto se logrará cuando millones de personas pobres, dejen de serlo. Y eso claramente no se logrará con los planteamientos de la izquierda, regalando dinero que el Estado no tiene, ni mucho menos quitando al rico para darle al pobre. No se logrará con los planteamientos radicales de la izquierda, pero tampoco con los populistas y continuistas de la derecha.

Ricos más ricos aún, clase media volviéndose rica, pobres volviéndose clase media y con cero pobreza extrema; es el sueño que deberíamos tener como nación. Desde mi perspectiva, eso se lograría con un estado facilitador y poco intervencionista, un Estado que nos haga la vida simple a todos y nos deje libremente crecer, que facilite la creación de riqueza de propia mano del emprendedor. No un Estado intervencionista, que regale bonos, genere más gasto público o controle empresas.

Necesitamos un modelo donde los empresarios respetuosos de las personas puedan crear más puestos de trabajo formales, pero formales de una manera sencilla. Empresarios de todos los tamaños que confíen en las autoridades, en la igualdad ante la ley. Que puedan hacer crecer o decrecer el tamaño de su empresa según el mercado lo necesite, sin sentirse ahogados o amenazados. Un modelo de libertad y respeto.

No te equivoques. No creas que podrás disfrutar más tiempo de lo que tienes si los que menos tienen se mantienen así. Estamos al límite y debemos elegir bien el modelo que necesitamos.

Un gobierno de ideas trasnochadas, asistencialista y controlador, será una muerte lenta. Un gobierno confrontacional y extremista, por más que suene bien, podría llevarnos por la ley del péndulo al extremo radical de izquierda en el 2026, sin pasar por Argentina.

Si no quieres pensar en los demás, eres libre de hacerlo. Piensa en ti y en la mejor forma de mantener lo que tienes o tener más y sobre todo poder mantenerlo en el tiempo. Eres libre, pero recuerda que no vives en una isla desierta y que tenemos muchos ejemplos en países vecinos donde los extremos que no nos gustan están ganando producto de esa miopía. De ti depende.

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