Tras el luto por los 31 fallecidos que dejó el triple atentado en Bruselas, la capital de Bélgica, el último martes, el gobierno belga está decidido a pasar a la acción y adelantar su intervención en Medio Oriente donde tenía acordado reemplazar a los aviones holandeses en julio en los bombardeos que la Coalición Internacional -encabezada por los Estados Unidos de América– mantiene contra las posiciones del Estado Islámico en la frontera entre Siria e Iraq.
LEA TAMBIÉN: EE. UU. mató al número dos del Estado Islámico
El anuncio vino de parte del primer ministros Charles Michel, que confirmó el envío de aviones caza F-16 tras una reunión sostenida con el secretario de Estado de los Estados Unidos, John Kerry. Como se sabe, el Parlamento belga ya había tomado la decisión de sustituir a los bombarderos holandeses en enero de este año. El clima de alerta que vive el país europeo sumado a la presión por la dimisión de dos ministros relacionados con la seguridad interna podría llevar a que se extiendan los bombardeos inicialmente estipulados contra territorio iraquí hacia Siria.
LEA TAMBIÉN: Polonia anuncia que dejará de recibir migrantes tras atentados en Bruselas
“La verdadera razón por la que el ISIS está recurriendo a ataques fuera de Oriente Próximo es porque su fantasía del califato se está derrumbando. Su territorio se reduce a diario, sus líderes están siendo diezmados y sus combatientes están huyendo”, explicó Kerry, secretario de EE.UU. en conferencia de prensa junto a Michel. Así también, el funcionario estadounidense expresó sus condolencias por los dos compatriotas fallecidos en los atentados del martes y aseguró que “tendremos éxito, destruiremos el Estado Islámico”.