El congresista de Fuerza Popular, Moisés Mamani, dijo estar incómodo porque ahora la ciudadanía lo califica como un agresor sexual. El acusado de tocamientos indebidos se presentó ante la Comisión de Ética del Parlamento para rendir cuentas.
El grupo investigador dirigido por la oficialista Janet Sánchez colocó en agenda el caso del legislador, quien fue denunciado por una aeromoza de la aerolínea Latam.
Durante su intervención, Moisés Mamani contó que es blanco de burlas cuando acude a cualquier lugar, sea fuera o dentro de las instalaciones del Congreso.
«Mi imagen está sobre los suelos (…) Todo el mundo me critica y me miran, me dicen que soy un tal por cual», señaló.
«Ayer estuve un poco mal, incluso aquí tengo el informe de la clínica, yo voy a sentarme y todo el mundo se escapa. ‘No, no te sientes que te van a tocar’. A ese extremo es lo que ha llegado. Eso incomoda», narró.
PERDIÓ CONOCIMIENTO
En otro momento, relató que un tripulante se acercó para indicarle que debía ubicar su equipaje en otro espacio. Al acatar la medida, precisó, tuvo un desmayo.
«E incluso he visto luces. Para no caerme, solo atiné a agarrarme del asiento y avanzar hacia adelante», apuntó, al añadir que allí la aeromoza le llamó la atención.
«Acercándome a mi asiento escucho una voz que dice: ‘Señor’. Y le dije: ‘Perdón'», prosiguió.
Finalmente, negó que haya tenido intenciones de “manosearla con morbosidad”. “Quizás han pensado que estaba sentado y he empezado a mañosear. Ahí dije que estoy un poco mal y subieron los señores de seguridad y ahí se escucha bien claro que dije si había una silla de ruedas y me la han facilitado».