Tanto se habló de lo ocurrido en la Copa América y en la Copa de Oro que no se le dio la atención merecida a la mejor exhibición de futbol que hubo en estos últimos tres meses, el mundial sub 20 disputado en Nueva Zelanda.
Cabe resaltar que el seleccionado serbio alcanzó el primer lugar luego de ganarle a Brasil; pero este artículo no está enfocado en el rendimiento serbio o en las anécdotas de este certamen, sino, en la constante buena actuación de los equipos africanos en campeonatos juveniles. Desde el mundial de Egipto en el año 2009 hasta el del presente año, los equipos africanos siempre han tenido destacables actuaciones siendo Ghana uno de los protagonistas.
En el mundial de Egipto 2009 Ghana se coronó campeón frente a Brasil en una final en la que destacó Dominic Adiyah, posteriormente galardonado con el premio a mejor jugador y goleador del campeonato. El mundial del 2011 disputado en tierras colombianas no significó un buen mundial para los equipos africanos, siendo su máximo galardón el premio Fair Play para la selección de Nigeria. En Turquía 2013 la mejor selección fue la francesa liderada por Paul Pogba, en este campeonato Ghana quedo en tercer lugar teniendo en sus filas al goleador del campeonato, Assifuah. Si bien es cierto, este campeonato lo ganó Francia, es muy importante resaltar que de los 21 jugadores convocados 9 de eran nacidos en África o con ambos padres africanos. El ejemplo más claro es Pogba quien es nacido en Guinea. Por último, en el último certamen entre los cuatro mejores quedaron las selecciones de Senegal y Mali. El premio al mejor jugador se lo llevo Adama Traore de Mali, quien ahora juega por el Mónaco de Francia.
Lamentablemente en muchos países africanos existen graves problemas en el ámbito registral con respecto a las actas de nacimiento afectando no solo al futbol sino también a la organización estatal africana como en la falta de control en los menores de edad que puede llevar al trabajo infantil, inaccesibilidad a la educación, entre otros problemas. Es por esta razón que muchas personas le quitan mérito a los conjuntos africanos, alegando que sus jugadores pasan el límite de edad establecido. La supuesta ventaja africana se daría por un mayor desarrollo físico y mayor experiencia por parte de sus jugadores.
Es cierto que años atrás algunas selecciones africanas se vieron envueltas en problemas relacionados con las edades de sus jugadores, siendo Nigeria la selección más polémica. En el mundial sub 17 del 2007, la selección nigeriana se coronó campeona pero dos años después se comprobó que 15 de sus jugadores eran mayores a la edad permitida, con jugadores de hasta 25 años. Esto no significa que las selecciones africanas obren de mala fe y cambien las actas de nacimiento, la verdad es que muchas veces no existen tales actas o las personas son inscritas pasados algunos años debido al alto índice de mortalidad infantil en tierras africanas.
Hoy en día la FIFA no es ajena a esta situación y ha podido contrarrestar este problema con ayuda de la ciencia, garantizando así que todos los jugadores que participen de estos mundiales cumplan con el requisito de edad, favoreciendo de esta manera al futbol y al juego justo. Para los certámenes que albergan a jugadores menores a 17 años, la FIFA realiza una serie de resonancias magnéticas a los jugadores, las cuales tienen un 99% de asertividad. Por otro lado, para los mundiales sub 20, la FIFA impone el uso de unas pruebas de Rayos X a todos los jugadores participantes también con un alto índice de veracidad.
Quiero terminar este artículo diciendo que hoy en día estamos viendo un futbol cada vez más físico, no en el sentido de que vemos jugadores altísimos y con un gran biotipo sino en el sentido en que todos sabemos que es vital y necesario que cada jugador tenga un recorrido tanto en ataque como en defensa. El futbol ha cambiado y es por eso que ahora vemos que cada jugador corre en promedio por partido un aproximado a 11 kilómetros. Si a este orden táctico en el que los 11 deben correr le añadimos talento y buen pie, es así como podemos gozar viendo al Barcelona, Bayern Munich, Atlético de Madrid, la lista es larguísima. Equipos que cuentan con jugadores muy talentosos pero que están estrictamente regidos por un orden táctico en el que deben tener la responsabilidad de trabajar en defensa tanto como en ataque.
Es por esta razón que los seleccionados africanos destacan en los campeonatos juveniles, torneos en los que se corre más de lo que se juega, donde el talento todavía está desarrollándose y evidentemente los africanos destacan en el ámbito físico. No encontramos estos resultados africanos tan positivos dentro de los mundiales de mayores ya que estas selecciones todavía no cuentan con entrenadores o jugadores que tengan ese orden táctico en su estilo de juego. El día que estas selecciones encuentren la brújula tácticamente, nadie va a querer tener que jugar contra ellos.