Durante los últimos meses, la FIFA, la organización más grande en cuanto a futbol concierne, se ha visto envuelta en una tormenta negra dominada por la corrupción que empaña y ensucia el deporte más popular y querido a lo largo y ancho del mundo.
Se especuló mucho si estos problemas de corrupción de la FIFA a manos de su presidente reelecto Joseph Blatter, tenían suficiente fuerza y validez como para poder hacer que el hombre más influyente en el mundo del futbol deje de tener tanto poder y no siga perjudicando a clubes, deportistas, asociaciones y sobre todo a los numerosos seguidores de este deporte tan hermoso. Lamentablemente el suizo fue re electo por votación contra el jordano Al Hussein, quien se retiró de la contienda antes de que la segunda vuelta empiece. Cabe resaltar que Blatter no conto con los votos de las asociaciones pertenecientes a la UEFA y algunas a la CONMEBOL.
Cada día que pasa se hacen más evidentes aquellos presuntos actos de corrupción que invadían la tranquilidad de algunos miembros de la FIFA, algunos ejemplos son la Copa América 2015 disputada en el territorio chileno y la Copa de Oro jugada en los Estados Unidos. Es más que obvio para la mayoría de sudamericanos que la selección chilena llego a la final de aquella copa no solo por sus capacidades futbolísticas sino también por los “favores” o “regalos” que algunos miembros del cuerpo arbitral designado le otorgaba. A qué se debe este favorecimiento uno podrá detenerse a pensar, y bueno, Chile como país no atravesaba un buen momento en los ámbitos social, económico y político. La presidenta Bachellet necesitaba un impulso que aliente a una población chilena necesitada de alegría y gloria. El escenario era perfecto: una Copa América jugada en su país, con la que hoy podemos decir que es la mejor selección chilena que han tenido a lo largo de su historia, nunca habían tenido el honor de poder hacerse con esta presea y desde que se les asigno este certamen futbolístico ya sentían la presión de campeonarlo. Viéndolo desde esta óptica, los chilenos necesitaban un ápice de gloria y satisfacción dentro de toda la amargura ocasionada por autoridades políticas y vieron en esta copa su mayor oportunidad para lograrlo.
Es por estas razones que Chile le pidió un favorcito a la FIFA, a cambio de que, ¿un voto en las elecciones de la FIFA, una cantidad de dinero, favor con favor se paga? Estos son solo elementos abstractos que vacilan dentro de la mente de las personas que no quieren ver morir al futbol y tratan de encontrarle una explicación racional al fraude visto en dicho campeonato.

Otro evento en el cual se pudo apreciar que ahora los partidos no lo juegan ni lo definen los futbolistas fue la Copa de Oro 2015. Antes de analizar esta paupérrima puesta en escena de los miembros más mafiosos de la FIFA, recordare que se avecina la Copa Confederaciones en el año 2017. Este campeonato alberga a los campeones de todos los certámenes internacionales que reúnen a las selecciones nacionales de todo el mundo y al eventual anfitrión de la Copa Mundial, en este caso Rusia. Cabe resaltar que para este torneo la CONCACAF solo cuenta con un cupo y este se conocería tras un partido play off entre el ganador de la Copa de Oro 2013 y la del presente año. En el año 2013 el torneo que alberga a todos los países de centro América, tuvo como ganador a la selección de Estados Unidos la cual espera al ganador de la versión 2015.
Antes de que empiece la copa en Estados Unidos la mayoría de los fanáticos del futbol soñaban con una final entre México y la selección local, pues es un clásico y sobre todo por la coyuntura social y política hoy experimentada entre los países fronterizos. Es más, la única manera de que ambos equipos se encontrasen seria solo en la final, dándole aún más entusiasmo y emoción al campeonato, pero ¿esto le convenía a la FIFA? Por supuesto que no, solo le convenía que México llegue a la final y que la gane. Si Estados Unidos campeonaba esta copa no habría partido de play off y obviamente se perderían millones en derechos de transmisión y auspiciadores para este clásico del futbol, es por esto que la FIFA apoyo a México en todo el certamen. Hubo flagrante robo a los panameños y a los costarricenses, perdiendo ambos, por penales inexistentes contra la selección azteca.
Para suerte de aquellos enemigos del futbol, Jamaica dio la sorpresa y logro vencer a la selección local dejándola fuera de la final y poniéndole el escenario preciso a México. Este resultado sorpresivo aseguro que el encuentro play off seria entre Estados Unidos y México. Sin duda alguna, la gente más malintencionada dentro de la FIFA está celebrando más que los millones de mexicanos por el título conseguido ante Jamaica, ya que mientras los aztecas ven su nombre por décima vez dentro del palmarés de la Copa de Oro estos sujetos ven sus bolsillos cada vez más llenos.