La estatua de Cristobal Colón que se ecunetra en el Central Park de la ciudad de Nueva York se encuentra en tela de juicio a raíz de que en la mañana de hoy haya aparecido manchada de sangre. En la parte de baja del monumento apareció un mensaje que dice «El odio no va a tolerarse» y otro mensaje que decía «Algo está por pasar.
En la mencionada ciudad norteamericana, se inició una revisión de los posibles «símbolos de odio» ubicados en espacios públicos, luego de que sucedieran los polémicos hechos Charlosteville, en Virginia. Colón, para muchos, es un símbolo de la discriminación y de la esclavitud. Se ha generado un gran debate en torno a quiénes deben tener un monumento en un espacio público.
Las pintadas fueron descubiertas a primera hora de la mañana por las autoridades del parque neoyorquino, y la policía abrió una investigación al respecto, detalló el diario New York Post.
El alcalde dicha ciudad, Bill de Blasio, dijo a los integrantes de la comisión que evaluará qué monumentos podrían ser eliminados pues son «símbolos de odio». Como se sabe, la estatua de Colón fue un regalo de inmigrantes italo-americanos en 1892.
Antecedente sudamericano
En Buenos Aires, Argentina, el gobierno de Cristina Fernandez, en 2013, decidió remover la estatua de Colón que estaba frente a la Casa Rosada, las razones que manifestó la presidente fueron que «había otros personajes que merecían más es privilegio.