¿Se puede escribir de todo en la web?, por Alfredo Luna Victoria

1.166

Los formatos de medios digitales no se miden por ventas. El tráfico es el dolor de cabeza de la mayoría de los equipos web. Es decir, la cantidad de visitas que recibe la página del periódico o revista. Ahí radica un gran problema, ya que el lector/cibernauta tiene un comportamiento distinto al de material impreso.

¿Las noticias ‘serias’ es lo que leen las personas? La respuesta es polémica. El medio está obligado a responder por hechos coyunturales, ya sean de política o economía. No obstante, también será necesario mostrar resultados.

Haciéndonos resistentes a este tipo de situaciones, solo demuestra el poco compromiso de uno con la empresa que lo contratada, pero ¿dónde queda la ética periodística? ¿todo es publicable?

Virales, entre otras noticias con poca relevancia, parecen ser la salvación. El periodista de antaño o el joven posero morirá en su ley y dirá: “Esas son cojudeces” (lo he escuchado varias). Sin embargo, los números en concreto dicen otra cosa.

El mismo que se queja y vocifera: “Oe, dame cultura”; es el mismo o vale igual que el que le da clic a la noticia sobre Karla Tarazona o el perrito viral. Así de dura es la situación. Además, no eres César Hildebrant por evitar esas noticias y mucho menos te conviertes en el Zorro Zupe por saber de las mismas.

¿Adaptarse o morir? Una decisión nada fácil. Te enseñan todo lo básico en las universidades, haciéndote creer que nunca va llegar el momento de elegir o que tu primer trabajo será en la BBC de Londres y nunca tendrás este problema.
No es cuestión de tomar un bando. No hay bandos. Es cuestión de tener concordancia entre las acciones tomadas y los valores de uno.