Esta madrugada ocurrió un tiroteo a una fiesta de Halloween en Newburgh, Nueva York. El incidente dejó dos muertos y varios heridos, según los informes.
La policía fue llamada a la escena justo después de la medianoche del domingo. Horas más tarde empezó la búsqueda de uno o varios hombres armados.
Una joven de 18 años de edad, identificada por su padre, fue una de las víctimas que fueron baleadas fatalmente. «Ella sólo estaba en una fiesta, y lo siguiente que me entero, recibo una llamada telefónica diciendo que a mi hija le dispararon en la cabeza. Estoy devastado en este momento. Es difícil. Ella es mi hija mayor».
Otras siete personas también recibieron disparos en la fiesta.