Un Airbus A321, de la aerolínea rusa Kogalymavia, se estrelló esta mañana, a 20 minutos de haber despegado, en la península egipcia de Sinaí, una región con intensa actividad de grupos insurgentes. En la nave viajaban un total de 224 personas (entre pasajeros y tripulación) ninguna de las que sobrevivió al siniestro. Según los primeros reportes de los policías egipcios en la zona, los restos de los fallecidos se encuentran revueltos entre los restos del avión y esparcidos en un radio de 5 kilómetros. Las dos cajas negras han sido recuperadas y ya se encuentran en los laboratorios de los investigadores; hasta que se sepan las causas del desastre, algunas aerolíneas -como Lufthansa y Air France- han cancelado sus vuelos por esa ruta.
El avión, que se dirigía del balneario egipcio Sharm el-Sheikh hasta la ciudad rusa de San Petersburgo, desapareció de los radares a 22 minutos de haber emprendido el despegue cuando sobre volaba la zona central de Sinaí. Adel Mahgoub, presidente de la empresa estatal administradora de los aeropuertos egipcios, aseguró que el Airbus había pasado los controles técnicos con éxito antes del despegue. El mandatario ruso, Vladimir Putín ha anunciado la creación de una megacomisión para investigar el accidente.
A través de un comunicado, el grupo yihadista Welayt Sina, se atribuyó el atentado como protesta contra «los bombardeos rusos que matan a cientos de civiles en Siria«. En una nota publicada en su plataforma web, el diario ElPaís de España revela que una cuenta presumiblemente de ISIS, tuiteó «los que asesinas, seréis asesinados».
Por otro lado, el ministro de Transporte de Rusia, Maxim Solokov, clasificó de «fantasía» la versión del atentado terrorista y pidió que no se la considere «fiable». Así también, el primer ministro egipcio, Sherif Islamil sostuvo no creer que, tras la caída de la nave, haya acciones «irregulares«. Solokov añadió que el Kremlin no tenía información sobre una supuesta prohibición de vuelo sobre la zona.
Ha pasado un mes desde que el presidente Putin anunciara el inicio de bombardeos rusos en territorio sirio, en el marco de la lucha contra el Estado Islámico. En un mes, Rusia torpedeó 969 blancos terroristas y realizó -en total- 1008 ataques aéreos.