¿Y por qué?

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Me ha llamado la atención que de buenas a primeras, sin aparente justificación, aparecieran una cadena de noticias y artículos en contra del Cardenal Juan Luis Cipriani.

A mediados de abril publica el periodista y ex sacerdote Juan Manuel Vidal un artículo atacando al cardenal en un diario digital. Luego, los primeros días de mayo aparece otro en el diario El PaÍs de España; aquí también Rosa María Palacios y Fernando Vivas hacen eco y le ponen su picante. Y otros los circulan por redes sociales y correos electrónicos.

Me pregunto: ¿Por qué?

¿Acaso el Cardenal ha dado alguna declaración polémica últimamente? ¿Acaso hay elecciones en la Conferencia Episcopal peruana? ¿Acaso está cerca de cumplir los 75 años de edad y por tanto, dejar el arzobispado de Lima? ¿Acaso no ha pasado más de dos meses de la marcha por la vida?

La suspicacia crece cuando identificamos que la “inspiración” de estas notas son muy jaladas de los pelos: por un lado, que en el Opus Dei no eligieron a Cipriani como vicario auxiliar. Por el otro, el hecho de que el Papa viaje a Ecuador y Bolivia sin “detenerse” en el Perú.

Pasemos a analizar estas razones:

La primera: es absurdo pensar que un Cardenal puede ser vicario auxiliar de un obispo pues está en un rango superior en la jerarquía; además, según los estatutos del Opus Dei, el cargo de Prelado es vitalicio y el actual está muy bien de salud, por lo que no hay “elecciones” en la institución. Dentro de la Obra, Cipriani goza de gran cariño y prestigio. Recordemos adicionalmente que el nombramiento del vicario auxiliar fue en diciembre. ¿Por qué ahora lo relacionan con el purpurado peruano?

La segunda es más trivial inclusive: razonar de que el avión del Papa pase de Ecuador a Bolivia sin “bajar” en el Perú es una señal de que el Papa se lleva mal con el cardenal peruano es como decir que Gareca tiene un odio visceral contra Benavente porque no lo llevó a la Copa América. Es más, si fuera lógico el razonamiento de estos “analistas”, ¿qué podríamos concluir que Bergoglio no visite Argentina si está a un pasito? ¿Será acaso que su relación con el cardenal argentino de turno es peor que la que tienen judíos y palestinos? ¿Cómo es posible que no visite su país, y sí lo haga con Paraguay? ¿Y qué pensaran colombianos, chilenos, brasileros, uruguayos, venezolanos? ¿Con tantos cardenales se lleva mal Bergoglio?

Se dice que en política no hay coincidencias gratuitas. Y si fuera así, algo más debe explicar estas consideraciones falaces sobre el Cardenal Cipriani. ¿Qué será? ¿Qué tenemos ad portas en el Perú que justifique estos ataques? ¿Por qué se quiere prevenir a la opinión pública? Si el suelo está parejo, ¿por qué tanto alboroto?

¿Serán acaso las elecciones presidenciales que se avecinan?

¿Será que algún grupo de poder quiere decapitar a la iglesia católica peruana para allanar el camino a futuras leyes que favorezcan sus intereses?

¿Será que el liderazgo del Cardenal es un obstáculo para algún lobby?

¿Será que está por resolverse el tema de la PUCP?

Habrá que estar atento al próximo ataque para ver de dónde viene, en qué medio, quien lo firma y bajo qué pretexto. El acertijo se irá resolviendo siguiendo estas huellas.